Ahora que estamos en elecciones
(2016 bis), vuelvo a oír mucho ruido y pocas nueces. Es ahora cuando los partidos menos tiran de programa
(qué lástima Anguita) y más de casquería. Parece que todos están de acuerdo:
las elecciones se ganan con el corazón, o mejor, con las vísceras, no con la
razón.
En estos momentos es cuando menos
se profundiza en lo que se dice, cuando las propuestas son meros slogan de
enganche y carentes del mínimo rigor.
Hace poco escuché (es solo un
ejemplo), que a nuestro País nos vendría mejor una política económica expansiva (más gasto público),
porque EEUU lo hizo y ha salido de la
crisis. Le faltó añadir que la sociedad estadunidense tiene otros
parámetros muy distintos a los nuestros: flexibilidad en salarios, legislación
laboral mucho más laxa, costes laborales relativamente menores, seguridad
social cuasi-privada, pensiones ídem, movilidad geográfica etc. Y EEUU como país, su tamaño, el poder de sus
Instituciones, sus relaciones internacionales etc., no se parece tampoco mucho
a España.
http://www.expansion.com/economia/2016/05/18/573cbcdae5fdea55598b4624.html
http://www.expansion.com/economia/2016/05/18/573cbcdae5fdea55598b4624.html
Recuerdo que en mi primer curso
de economía tuve como asignatura Sociología.
Por aquél entonces sospechaba que la ofrecían para devolver algún favor al
profesor titular. Nunca lo supe.
Sin embargo, ahora que sé algo
más de economía, creo que esta asignatura sería necesaria en todos los planes
de Economía en las Universidades.
Porque a diferencia de otras
materias, en economía, las medidas que
han resultado satisfactorias en el pasado, no garantizan que lo sean en la actualidad. En economía, las medidas que funcionan actualmente en
un país, no son trasladables a otro. Es
más, pueden ser nefastas. En economía, las medidas que parecen que funcionan
hoy, no necesariamente van a funcionar mañana.
Lo único que la Economía puede
decirnos sin pestañear, es que si un país va bien, tarde o temprano, tendrá su
crisis. Seguro.
Seamos claros, un ciudadano Danés
no piensa, no tiene los mismos intereses vitales que un ciudadano Español. Y
cuando digo Danés, quiero decir también, Chino, Canadiense o Japonés. Quien no
lo quiera entender, peor para él.
Pero también es verdad que un
Español de hoy es distinto que el de hace 20 años. La sociedad va cambiando, va
modificando y modulando su forma de pensar. Lo que nos apasiona, lo que nos cautiva hoy, no tiene
nada que ver con los intereses de nuestros padres. Lo mismo sucede con nuestros
hijos respecto a nosotros, sus padres. Y entre cualquier generación pasada o
futura.
Y si un Estado es el conjunto de
sus miembros, para conocerlo y poder ofrecer recetas económicas con un poco de
seriedad, hay que conocer su Sociología.
Porque las medidas económicas pueden y deben ser distintas. Se puede ofrecer un
conjunto de medidas económicas para países distintos, para épocas distintas,
pero esperar que funcionen porque ya funcionaron, es de simples y vagos.
Quizás no le debieran ningún
favor a nuestro profesor de Sociología y era él quien nos estaba ofreciendo el
favor de anticiparnos esta lección.